lunes, 31 de agosto de 2009

Menor asesinado es sepultado en medio de amenazas de venganza






























Santiago.- Los restos del jefe de la banda “Los Menores”, que opera en Santiago y que fue asesinado de varios balazos por desconocidos que lo interceptaron en el sector ensanche Simón Bolívar de esta ciudad, fueron sepultados ayer en el cementerio municipal del Ingenio Abajo, en medio del clamor de sus familiares de que se haga justicia y la advertencia de sus amigos de que esa muerte no quedará impune.


El cadáver de José Manuel Peralta (Cucho), quien estaba a punto de cumplir los 18 años, fue velado en su residencia de la calle Principal del sector Hermanas Mirabal, antigua Yaguita del Egido, donde asistieron familiares, vecinos y allegados a la familia.


Muchos de sus amigos que asistieron al velatorio ingerían bebidas alcohólicas y enfurecidos comentaban que la muerte de Cucho, como se le llamaba en el sector, no quedaría impune.


Su padre José Peralta pidió a la Policía que profundice las investigaciones en torno a la muerte de su hijo.


En ese orden, manifestó que aunque su vástago cuando estaba más muchacho cometió algunas bellaquerías, hace un tiempo que estaba tranquilo, debido a los consejos que siempre le daba.


En cuanto a los informes de que había despojado a una mujer de una cadena en una avenida céntrica de Santiago y que algunos de sus parientes lo siguieron y tras darle alcance le dieron muerte, Peralta dijo que prefiere esperar los resultados de las investigaciones, porque ahora que su hijo está muerto se están diciendo muchas cosas.


Los vecinos
Los vecinos del sector Hermanas Mirabal lamentaron la muerte de Cucho, pero dijeron que eso era de esperarse, porque desde niño andaba por mal camino.


“Yo lo siento por su madre y su padre que son buenos vecinos, pero esos muchachos no salieron fácil, hay uno preso por robos y otro está huyendo por matar a una persona para quitarle una passola”, dijo una señora del barrio que participaba en el velatorio. De su lado, Roberto Peralta, un vendedor de frutas residente en el barrio de donde era oriundo el supuesto pandillero, dijo que su muerte violenta es lamentable.








Fuente L.D.

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